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PERU: LOS CRIMINALES DE CURGOS ABSUELTOS
Familiares rechazan fallo del juez Oswaldo Velarde.
24 años de impunidad. En 1983 7 peruanos fueron torturados y asesinados. Ahora el régimen aprista protege a los criminales.
Los familiares de las víctimas de la matanza de Curgos – Huamachuco, frente al fallo de la impunidad por parte del Juez Oswaldo Velarde Abanto, del Juzgado Penal Mixto de la Provincia de Sánchez Carrión, y su ratificación de la Sala Mixta Descentralizada que preside el Dr. Víctor Raúl Castilla Córdova, denunciamos la acción prevaricadora, corrupta e irregular en la administración de justicia en la judicialización del Caso 1007126 –CVR registrado como secuestro de 7 ciudadanos el 21 de julio de 1983, tortura, asesinato de 6 jóvenes (4 hombres y 2 mujeres), desaparición forzada y entierro clandestino en una fosa común, hallada el 23 de marzo del 2004 en el cementerio San Agustín del distrito de Huamachuco, provincia de Sánchez Carrión, departamento de La Libertad, República Constitucional del Perú.
NI OLVIDO NI PERDÓN
Los jueces Velarde y Castilla Córdova de la impunidad, no sólo asumieron a plenitud los argumentos esgrimidos por los abogados defensores de los criminales, (18 inculpados entre policías de la ex Guardia Civil, ex Policía de Investigaciones del Perú, 02 médicos forenses de 1983, el Juez, el Fiscal, y los mandos superiores de las Operaciones Inteligencia-OI); sino que buscan negar la matanza que se perpetró por parte de la patrulla de policías que allanó el domicilio del Sr. Carmen M. Sandoval Layza con el pretexto de buscar “narcotraficantes”, y bajo el mando siniestro de los ex Mayor PIP-OI SERGIO SANTOS SEQUEIROS MONTESINOS, ex Teniente Coronel PIP-OIFELIX ARISTIDES JIMENEZ LOPEZ, ex Alferez PIP-OI, PERCY ARTURO ARAUJO GARCIA (residente en Canadá), del ex Capitán SEGUNDO AURELIANO ALVARADO GUERRERO (residente en Los Angeles-EE.UU.), los policías cometieron fraude dolosamente con ventaja y alevosía y planificaron el secuestro sacándolos vivos de la bodega del Jr. San Pedro Nº 619 del distrito de Curgos, atados de pies y manos con los ojos vendados los subieron a una camioneta Land Robel de la policía y los llevaron a matar, toda la comunidad sabe y los vieron que a la altura de un bosque del sector CHAMIZ violaron a las mujeres, torturaron y mataron a unos y a otros los torturaron y mataron en la comisaría de Huamachuco, siendo necropsiados solo 02 cadaveres, e identificados LESTER JOAQUIN VEREAU LUJAN y ELIZABETH SANDOVAL ARAUJO.
Fueron cómplices de este crimen el Fiscal GUILLERMO REBAZA TAMAYO, el Juez ROQUE LARA ESTELA (conocidos por la población como los “bizcochos” los “pili y mili” por sus características anatómicas muy similares (gordos y baja estatura) tanto como su conducta reprobada por la comunidad. Estas autoridades en 1983, fabricaron todos juntos un enfrentamiento entre la patrulla conformada por los policías JUAN ANTONIO RIOS CAMPOS, HUGO JESÚS ROJAS RAMOS, JUAN REYES VERA, JOSE REYES MENDO, OSCAR ANIBAL COMECA VALLEJOS, JOSE SALDAÑA PORTILLA, CARLOS ESTANISLAO REYNA PELAEZ, WILLIAM ENRIQUE CHIRINOS ALVA, FRANCISCO SOTO DE LA CRUZ, CARLOS TRELLES, y los médicos JUAN SANCHEZ TOLEDO Y JUAN CARLOS TAM BARR, y los supuestos terroristas.
Lo cierto es que todos los jóvenes que salieron vivos del domicilio-bodega del Sr. Sandoval (incluida su hija, una menor de 17 años), aparecieron torturados y muertos como lo evidencian las fotos y los suficientes medios probatorios de balística y las necropcias (Informe del EPAF, del EFE del IML-Ministerio Público 11-agosto del 2004) que los reconoció el Fiscal Muñoz Egúsquiza en su denuncia ante el Juzgado Mixto de Sánchez Carrión, el mismo que dio lugar al autoapertorio del 22 de Agosto Del 2005 mediante instructiva EXP.154-2005.
Desde el Juez DIOMEDES ESPINOLA OTINIANO, el Juez suplente SANTOS CRUZ PONCE, el actual Juez Liquidador OSWALDO VELARDE ABANTO, se han dado irregularidades que los familiares hemos ido observando y la respuesta era que no podíamos interrumpir el proceso de las investigaciones que debían terminar en abril del 2007; sin embargo y con extrañeza total ahora se sabe que habían Resoluciones y fallos que han ido cambiando las órdenes de captura dictadas por un Juez, por órdenes de libertad y comparecencia dadas por otro juez.
Las apelaciones hechas al Juez Oswaldo Velarde y a la Sala que preside el Dr. VICTOR RAUL CASTILLA CORDOVA, han sido denegadas para ratificar la libertad de los criminales de Curgos. Ante esta falta de imparcialidad y de clara corrupción de la administración de Justicia hemos denunciado a estos funcionarios por inconducta funcional ante la ODICMA, y lo haremos ante la autoridad competente, en tanto persiste complicidad institucional cuando vemos que hasta los hoy los mandos y los Jueces y Fiscal no rinden instructiva, y los que tiene orden de comparecencia restringida se están fugando o han regresado a su residencia en CANADA, como PERCY ARAUJO GARCIA, y los jueces no hacen nada por que cuando la INTERPOL lo entregó a Perú le dieron libertad.
LLAMAMOS AL PUEBLO PERUANO A REDOBLAR LA LUCHA CONTRA LA IMPUNIDAD Y POR LA DEFENSA IRRESTRICTA DE LOS DERECHOS HUMANOS
El pueblo, las organizaciones gremiales y las instituciones de defensa de los Derechos Humanos del Perú, le exhortamos al DR. TEOFILO IDROGO Presidente de la Corte Superior de Justicia de La Libertad, para que el Juez VELARDE SE INHIBA DE TOMAR CONOCIMIENTO DEL CASO Y ENVIE TODO LO ACTUADO A LA SALA PENAL NACIONAL, porque consideramos que se debe poner en primer plano la justicia y el respeto a los Derechos Humanos en la tarea de Reparación y Reconciliación, que estamos comprometidos los familiares de las victima del conflicto armado interno que vivió el país 1980-2000.
Al cumplirse estos 24 años de la desaparición de nuestros seres queridos, decimos NO A LA IMPUNIDAD, exigimos: CADENA PERPETUA PARA LOS CRIMINALES y cómplices del crimen de lesa humanidad, para que no se repita esta violación a los derechos humanos, DEMANDAMOS celeridad en la judicialización y sanción para los responsables de la destrucción de nuestras vidas, familias, hogares, orfandad de nuestros hijos, desprotección de nuestros padres y abuelos.