3 de noviembre de 2024

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CON EVO MORALES NO HA CAMBIADO PARA LOS TRABAJADORES

Por: Econoticiasbolivia.com.

6 de mayo de 2007

Un año y medio de gobierno de Evo Morales y sigue el desempleo, los salarios de hambre son moneda común y la explotación laboral crece sin límites
"Hasta ahora nada ha cambiado para los trabajadores. El aumento salarial al mínimo es de 25 bolivianos (tres dólares) y si lo dividimos por 30 días, eso no sirve ni para el carajo", dice el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Pedro Montes.

Minero de Huanuni, Montes asegura que los trabajadores no sienten que el país haya cambiado para bien con casi un año y medio de gobierno del presidente Evo Morales: sigue el desempleo, los salarios de hambre son moneda común y la explotación laboral crece sin límites.

En la COB ya tienen listo el pliego petitorio, centrado en lograr un aumento general de salarios y en la industrialización urgente del gas y los recursos hidrocarburíferos. Por ahora, esperan pacientemente que desde Palacio se les conceda una audiencia, en la que quieren hablar de las grandes transformaciones estructurales de la economía y del poder. Este es el diálogo que el líder obrero sostuvo con La Época:

¿Cuál es la situación laboral?

Los salarios están congelados desde 1985, desde el maldito decreto 21060 (con el que se inicia el neoliberalismo en Bolivia). Allí comienza a crecer la desocupación y el ejército de los que no tienen empleo y se profundiza la crisis, la pobreza y la hambruna.

La lucha se ha hecho fuerte desde ese momento. Primero fue febrero negro en el 2003 y después octubre del 2003, donde dejamos nuestros muertos y heridos para empezar a expulsar al neoliberalismo, a enterrar al neoliberalismo. Esto hicimos en mayo y junio del 2005.

Este es un proceso de los trabajadores y no de ningún partido político, como ahora quieren hacer ver. La lucha por los cambios se ha dado a la cabeza de la Central Obrera, pero ahora esto no ha servido de nada con un gobierno de Evo Morales

¿No hay mejoras?

Es así, no ha cambiado nada. En las jornadas de octubre hemos dicho que el gas no sale por Chile, ni por ninguna parte. El clamor del pueblo, el clamor de los mártires y heridos era para industrializar nuestro gas en nuestro país, para superar la crisis y la desocupación y la pobreza del país, pero nada de eso ha ocurrido, siguen regalando el gas como materia prima.

Los cambios han sido de forma, no hay cambios estructurales. Se vende más gas y está entrando más plata, en algunos casos se ha doblado y se ha triplicado. Pero para nosotros eso es sólo discurso, la plata del gas no ha llegado al bolsillo de los trabajadores.

El aumento salarial del 6 por ciento no sirve para nada. El costo de la canasta familiar ha subido y por eso decimos que los que no conocen familia, no saben de las obligaciones que tiene un trabajador como padre de familia. Ese aumento ha sido para nosotros totalmente una provocación, una respuesta totalmente negativa a nuestras demandas.

En el pliego petitorio único de la COB estamos presentando demandas inmediatas y políticas de orden estructural, con demandas históricas del pueblo. Vamos a esperar cómo nos responden. Hemos pedido una audiencia pero ni siquiera nos han dado una respuesta. Estamos haciendo ampliados de la Centrales Obreras Departamentales en los propios departamentos, a la cabeza de la Central Obrera Boliviana.

¿Qué es lo que demandan en salarios?

Con el salario mínimo de 500 bolivianos (62,5 dólares al mes) no se puede vivir. En su campaña electoral, el Presidente ha dicho que iba a dar 1.500, pero eso no se cumple.

Sin exagerar, en nuestro pliego petitorio estamos pidiendo 1.800 como mínimo nacional y en la canasta familiar para una familia de cinco miembros de 6.700 bolivianos. Hemos ido por los mercados y eso es lo que cuesta mantener una familia de cinco miembros.

¿Cuántos están ganando hoy los obreros?

Los obreros están ganando 800 bolivianos (100 dólares al mes), 1.000 bolivianos y cuando hacen trabajos de contrato se sube un poco. Pero tenemos que ver que en muchas empresas están agarrando el mínimo nacional, que no alcanza para nada. Nuestros compañeros jornaleros están con 400, con 500 bolivianos. Con las alcaldías, en el avance de obras, es peor y ya no se puede aceptar.

En Oruro, en la empresa chilena Enasa se paga 180 bolivianos. Son cosas que se ven, no compensan al trabajador y peor con el aumento del costo de vida en el país. Por eso toda esta hambruna, toda esta pobreza que hay en el país está empezando a desembocar en los asaltos, los changuitos (niños) están andando con clefa, hay mucha miseria, hay falta de trabajo y los salarios son de hambre.

¿Y las condiciones de trabajo?

Es terrible. Siempre hemos peleado por las ocho horas de jornada de trabajo, pero como no hay muchas fuentes de trabajo, los patrones han hecho que no haya límite a la jornada. Ahora es de 7 a 7, se trabaja 12 horas o más. Si uno no quiere trabajar así, lo botan, porque hay muchos más que están detrás de ese puesto. Son cosas que están pasando.

Por eso decimos desde la Central Obrera Boliviana que, en vez de dar un bonito (el bono escolar Juancito Pinto de 25 dólares por niño en edad escolar), no estamos en contra de la niñez, se debía dar la reactivación del aparato productivo, se debía fortalecer nuestro YPFB.

La plata que les está entrando debían poner en el aparato productivo, reactivar la industria minera para crear más fuentes de trabajo, en la industria fabril debían haber mejorado sus condiciones económicas, pero no hay nada de eso y algunas industrias, como en Oruro, están cerrando sus puertas.

Muchas empresas de nuestros compañeros fabriles están cerrándose o, en su defecto, están echando a la calle a los compañeros. El presupuesto no alcanza, dicen los patrones y triplican el trabajo para los compañeros.

¿Y ya hay estabilidad laboral?

Si habría esa estabilidad no estarían despidiendo a los trabajadores e inclusive a los dirigentes sindicales. Han derogado el artículo 55 del decreto 21060 y después de un año han sacado la reglamentación, igual han elevado de nivel a rango de ley lo del fuero sindical, pero sigue el retiro de los compañeros.

¿Cuál estabilidad? La estabilidad se va a dar cuando haya reactivación del aparato productivo, porque ese es el verdadero pilar para mejorar los ingresos de los trabajadores y también de los que están en los servicios y de los gremiales.
Si no hay reactivación hasta los compañeros gremiales van a seguir fregados. A veces venden una cosita, a veces no.

¿Y la situación de los campesinos?

El Presidente se cree muy indígena, pero no ha mejorado nada en el campo. A la final todos somos de raíz indígena. Aquí en la Central Obrera Boliviana no hay criollos, todos somos indígenas y mestizos.

En el campo lo que está pasando es que hay algunos vivos, como dirigentes y parlamentarios que tienen la plata, pero en el campo verdadero hay mucho sufrimiento. Ahí está la sequía y no hay proyectos de riego. ¿Por qué crees que los hermanos del campo vienen a las ciudades a estirar la mano? Los campesinos están abandonados. Igual pasa en el oriente, donde además hay discriminación.

¿Qué se debe hacer?

Si queremos hacer un proceso de cambio de verdad, debemos sentarnos a hablar con el Gobierno en una mesa para discutir sobre los grandes temas estructurales que permita cambiar toda esta situación del pueblo boliviano.

¿El gobierno está en deuda con la COB?

Totalmente. En este local de la COB, Evo Morales ha hecho el pacto de unidad con el compañero Solares, que ese tiempo dirigía la COB, con Felipe Quispe, Alejo Véliz, Miguel Zubieta y otros más, pero ¿qué cosa de eso se ha cumplido? Nada.
El Gobierno debía ver a su COB. Los errores del Gobierno han potenciado a la derecha y la coyuntura está fregada.

¿Cuándo presentan su pliego?

Tenemos listo el pliego, sólo queremos que el Presidente nos dé audiencia para que lo presentemos con todo el Comité Ejecutivo y los secretarios generales de las confederaciones, federaciones y Codes.