HUELGA GENERAL: INICIO DE ETAPA DE MOVILIZACIONES CONTRA LA REPRESIÓN
Por: Països Catalans. (Kaos).
La huelga incidió sobre todo en el sector de la enseñanza y en la acción coordinada para cortar carreteras e infraestructuras.
La jornada da paso a la manifestación masiva prevista para el sábado y a otras acciones por la libertad de los presos políticos.
Una Cataluña con presos políticos y las instituciones intervenidas. La “movilización permanente” anunciada hace tiempo por el independentismo toma ahora más sentido que nunca y, por eso, el ANC y Òmnium y otras entidades integradas en la Mesa per la Democràcia, se preparan para aumentar la intensidad de las actuaciones contra la represión de las instituciones españolas. La huelga general de este miércoles ha sido la primera evidencia, mientras que la manifestación de sábado también se prevé masiva.
De este modo, el paro de país ha tenido -como todas las huelgas- un seguimiento desigual. Así, a pesar de que varios sectores la han secundado con menos intensidad que el 3 de octubre -ya sea por las dudas hasta el último momento de su legalidad, la oposición frontal de sindicatos estatales como CCOO o la saturación de convocatorias de estas semanas-, la autoorganización de la ciudadanía en torno los comités de Defensa de la República ha sido decisiva para la incidencia en las carreteras e infraestructuras fuera mayor que nunca.
En cuanto al seguimiento de la huelga, los datos son dispares. El gobierno español lo ha tildado de “residual” -la Generalitat está en sus manos- y ha destacado que el consumo de energía ha sido un 3% superior al de martes, a pesar de que, en la huelga del 3 de octubre, fue un 8,3% inferior al previsto. Igualmente, ha asegurado que tan sólo ha sido relevante en enseñanza, con un 35% de huelguistas, mientras que en sanidad habría sido del 15,8%, en el comercio inferior del 10% y en la industria no habría alcanzado el 8%. El delegado del ejecutivo español en Cataluña, Enric Millo, ha lamentado la “vulneración de los derechos ciudadanos al impedir mediante actos vandálicos que muchas personas pudieran trasladarse con normalidad a sus puestos de trabajo o desplazarse libremente”. De hecho, ha hecho público que se ha detenido una persona y se ha identificado a otra por una agresión.
En cambio, el sindicato convocante, la Intersindical-CSC, la ha considerado un “éxito rotundo” y ha cifrado el seguimiento en el 45% en la enseñanza -coincidiendo con la USTEC, el sindicato mayoritario de docentes, que también llamaba al paro-, el 80% en universidades, el 40% en las administraciones públicas, el 60% en los medios, el 30% en los servicios y el 20% en la industria. Igualmente, destacaba la caída del 80% en la venta de fruta en Mercabarna.
De hecho, fuentes conocedoras del paro apuntan que ha sido de las huelgas generales con más seguimiento de entre las últimas realizadas, sólo superada por la del 3 de octubre. Ahora bien, ha destacado sobre todo porque ya a mediodía era la que más cortes de carreteras e infraestructuras había producido. Numerosas vías han visto interrumpida la circulación de buena mañana y durante todo el día, si bien a mediodía las acciones se han concentrado en las que entraban y salían del país, en lugar de las internas, con voluntad de resistir indefinidamente los cortes. Igualmente, el asalto a la estación del AVE de Girona ha sido la actuación más mediática de la mañana, igual que ha ocurrido a la estación de Sants al atardecer, cuya ocupación ha generado también cierta tensión.
Por otro lado, las concentraciones en el territorio convocadas por la Mesa per la Democracia también han sido multitudinarias. Por la mañana, han tenido lugar ante las diversas delegaciones de la Generalitat y en la plaça Sant Jaume de Barcelona, mientras que por la tarde se han realizado ante los ayuntamientos y en la plaça de la Catedral de la capital catalana. Es en esta última movilización -donde han participado unas 25.000 personas, según la Guardia Urbana- es donde han tenido lugar los mensajes más políticos y cuando el vicepresidente del ANC, Agustí Alcoberro, y el portavoz de Òmnium, Marcel Mauri, han dejado claro que la movilización en los próximos días irá en aumento.
Ante una pancarta con el lema “Libertad presos políticos!”, Alcoberro ha afirmado que los catalanes han empezado el “combate” pacífico y que están “dispuestos a llegar hasta el final“. En este sentido, ha defendido que “no queda otra salida que la victoria, que es la libertad de los presos, el regreso del Gobierno del exilio y la proclamación definitiva de la República“. Y en cuanto a la manifestación convocada en la calle de Marina para este sábado, ha anunciado que, a pesar de que el martes por la mañana sólo había 200 autocares fletados, esta tarde ya eran 500 e iban creciendo.
Así mismo, Mauri ha asegurado que es la ciudadanía quien decide cuando se para a pesar de los que “decían que no era día de huelgas y paros”, en lo que se podía entender como un mensaje a CCOO, que no estaba presente y que había criticado que las huelgas generales las tienen que convocar los sindicatos mayoritarios. “Por la liberación de los presos y nuestras instituciones, está claro que se parará, y se parará tantas veces como se quiera”, ha insistido. Y ha pronosticado que los catalanes estarán “tozudamente levantados hasta que se restaure la democracia“. Mauri también ha exigido al estado español que deje de “ocupar” las instituciones catalanas y ha declarado: “Nos quieren violentos pero seguimos siendo un pueblo pacífico“.
Otros ponentes también ovacionados han sido Ester Rocabayera, que ha reivindicado la Intersindical-CSC como una “herramienta” al servicio del país para convocar huelgas como estas, el portavoz de la USTEC, Ramon Font, Joan Caball, de Unió de Pagesos, o Marta Rosique, de Universidats per la República. El secretario general de UGT, Camil Ros, ha recibido en cambio una sonora pitada cuando ha subido al escenario y durante todo el parlamento, en que ha asegurado que está “para dar la cara” y ha reclamado que “todas las opiniones se respeten y se construya una sociedad plural”, además de destacar la “pluralidad” de su sindicato, que no ha llamado a la huelga ni lo hizo para votar el 1-O.
Mientras, la crónica política vinculada con la represión contra las instituciones y ciudadanía catalanas seguía muy viva, puesto que el Tribunal Constitucional ha anulado la declaración de independencia y ha vuelto a denunciar a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, por desobediencia, así como se ha ratificado que la Audiencia Nacional mantiene encarcelados al presidente del ANC, Jordi Sànchez, y el de Òmnium, Jordi Cuixart, porque ve riesgo de fuga.
“Saldremos a la calle siempre a reclamar su inmediata puesta en libertad y el cese de la oleada represiva y demofòbica del Estado”, ha aseverado en una de las concentraciones la vicepresidenta del PDECat, Neus Munté, mientras que el líder de ERC en el ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch, ha llamado a movilizarse “contra la existencia de presos políticos, la aplicación del artículo 155 y el despido del Gobierno”.
La diputada de la CUP Gabriela Serra ha valorado el éxito de la jornada: “Dijimos que por cada uno, saldríamos 10; que por cada 10 que cogieran, saldríamos 100; y por cada 100, saldríamos 1.000; y después, todo el pueblo. Y hoy ha salido todo el pueblo”. Igualmente, el primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello ha lamentado que “se están poniendo en riesgo las libertades y la democracia en el conjunto del Estado”, refiriéndose también a la intervención en el ayuntamiento de Madrid.
En cambio, la líder de C’s en Cataluña, Inés Arrimadas, ha lamentado los cortes de carreteras que asegura que perjudican a los “de siempre”, trabajadores, autónomos, pequeños empresarios y a los que quieren utilizar los servicios públicos “por los cuales tantos impuestos pagan”, y ha espetado “de la estelada no se come”. De forma similar, el presidente del PP en catalunya, Xavier García Albiol, ha denunciado que “hoy la mayoría de catalanes querían ir a trabajar y no han podido llevar a cabo su tarea con normalidad por culpa del fanatismo y radicalismo de unos cuántos”.
Fuente: Naciodigital y agencias